Desde hace unos meses, venimos siguiendo con mucho interés el desarrollo de un nuevo manga que desde luego nos está divirtiendo lo indecible. OnePunch-man, lo último de Yusuke Murata (Eyeshield 21) y ONE empezó a publicarse en la revista digital Tonari no Young Jump el pasado verano, y en sólo medio año se ha ganado ya una fama más que respetable. En apenas una veintena de capítulos, asistimos a una historia de acción y comedia realmente estupenda, con un humor muy de Akira Toriyama y un dibujo que nada tendría que envidiar al de Masakazu Katsura. Lo más gracioso es que estamos convencidos de que la serie ha logrado superar con creces las colaboraciones de estos dos maestros, como pueda ser Jiya, aportando algo que verdaderamente vale la pena leer.
Ciudad Z es un lugar abocado al desastre, cada dos por tres es atacada por algún monstruo con ansias destructoras que no hace más que poner en peligro la vida de sus habitantes. Uno de estos ciudadanos es Saitama, un tipo cuyo aspecto totalmente ordinario (olvidable, incluso) lo hace pasar por otra víctima más de los monstruos, pero en realidad se trata de una persona especial. A raíz de un ataque que vivió tiempo atrás, dedicó tres años de duro entrenamiento hasta perder el pelo y conseguir una fuerza descomunal, y ahora emplea su tiempo libre a deshacerse de las amenazas que acechan la zona. Cada vez que aparece un gigante, una quimera, un demonio o cualquier tipo de peligro, Saitama los despacha con un solo puñetazo. Así pues, con esta condición de héroe invencible, sólo hay una cosa que preocupa al joven: ¡¿por qué demonios no hay nadie que reconozca sus esfuerzos?!
La historia es un constante gag tras otro. En varias ocasiones, se recurre al típico ataque de un monstruo, que Saitama destroza con uno de sus puñetazos resultando en un final anticlimático pero totalmente hilarante. La clave es sin duda la indiferencia del héroe frente a estas situaciones de crisis, que se todavía impacta más con esa cabeza de huevo y la cara de palo que tiene, amén de los propios monstrencos y súper héroes, cada uno más ridículo que el anterior. Desde luego, estamos seguros de que OnePunch-Man llegará muy lejos y pronto dará mucho de qué hablar, sólo hay que esperar a que el boca a boca publicite un poco más la obra. Por último, no nos gustaría terminar sin destacar una vez más el increíble trabajo artístico que hace Murata, con una atención increíble por el detalle y un dibujo muy evolucionado respecto a su anterior éxito en la Shōnen Jump. Muestra de ello son las múltiples páginas dobles que emplea como recurso para dar una sensación de dinamismo impresionante, que algunos fans empiezan a recopilar en gifs animados como el de abajo para demostrar lo espectacular del efecto.

Cada fotograma es una doble página del capítulo
A mí este autor me parece muy interesante. Se junta con muy buenos guionistas y quedan cosas originales y bien hechas. Lo malo es que son dos obras más famosas tocan temas que venden poco en español: deportes y humor. A ver si hay suerte y lo publican por aquí.